Observación del Cometa 46/P Wirtanen por parte de la Agrupación Astronómica «Magallanes» en Gibalbín.
A Continuación voy a relatar un poco acerca del encuentro y posterior observación astronómica del Cometa 46/P Wirtanen que 6 integrantes de la Agrupación Astronómica realizaron el Jueves día 13 de Diciembre de 2018 en una carretera cortada situado en el desvío a la izquierda del punto kilométrico número once de la carretera comarcal que unen las pedanías jerezanas de Torremelgarejo (al lado del circuito de velocidad) y Gibalbín.
Los seis de Magallanes que nos dimos cita fueron Joaquín Barroso, Agustín Almoril y su hija Marta, Luis María Moguer, Manuel Jiménez del Barco (Lito) y un servidor. El primero en llegar fui yo a eso de las ocho y media de la noche y después llegaron por orden de llegada: Luis María, Lito, Agustín y Marta y por último Joaquín.
Fotografía de aquella noche en la que se aprecian de Izquierda a Derecha: Luis María Moguer, Manuel Jiménez del Barco, Agustín Almoril, David Chacón, Marta Almoril y el Telescopio de 16 pulgadas apodado «Goliat».
Nada más llegar yo la luna estaba relativamente alta y llena en un 33% aproximadamente, de todas formas eso no era óbvice para que no se pudiera ver el cometa puesto que aquella noche tenía una magnitud elevada de 3,5 de tal manera que podía verse sin problemas.
Pero antes que nada me gustaría hablar y hacer un poco de pedagogía cometaria hablando de los Cometas, su morfología, composición y algunas cosas más de ellos.
Los Cometas pueden definirse generalmente como bolas de nieve o hielo sucias de uno o varios kilómetros de diámetro que vagan por el Sistema Solar en órbitas más o menos excéntricas alrededor del sol. Algunas de éstas órbitas son elípticas, otras parabólicas e incluso hiperbólicas de tal manera que los Cometas con trayectorias hiperbólicas solo visitan el Sol una vez mientras que en su parte más alejada se pierden literalmente en el espacio profundo. Sus formas son muy diversas, desde esferas más o menos perfectas o semiperfectas a aglomeraciones muy irregulares semejantes a una patata o un cacahuete o incluso a formaciones con una geometría en forma de lóbulos conectados unos a otros más o menos estrechamente. Estas gigantescas formaciones de hielo no están compuestos únicamente de hielo sino que se encuentran entremezclados con polvo o rocas pequeñas que es en parte el material sólido que desprende el Cometa cuando se va aproximando al Sol en su perihelio que es la parte de su órbita en la que más se acerca al propio Sol. En la parte más lejana al Sol que es el afelio, el Cometa no sufre ninguna acción reseñable por lo cual su superficie no sufre evaporación, pero cuando se aproxima al sol sufre la sublimación del hielo superficial, es decir, todo el hielo de su superficie se convierte de sólido a gaseoso por lo cual el núcleo sólido del Cometa se envuelve de una atmósfera gaseosa más o menos densa que recibe el nombre de Cabellera o Coma. A medida que el Cometa se acerca más y más al Sol, la superficie sublima, es decir pasa de hielo a vapor directamente en cada vez más cantidad y ese hielo sublimado o evaporado recibe de forma frontal la acción del Viento Solar con su lluvia de protones que hacen que el el gas circundante del núcleo del Cometa se proyecte hacia el lado o dirección opuesta al Sol formándose una cola de gas ionizado que brilla o tiene luz propia debido a que los átomos gaseosos se ionizan debido a los fotones radiactivos que provienen del Sol. Esa proyección hacia atrás es decir hacia la parte opuesta o sentido opuesto en la dirección o sentido al Sol es perfectamente rectilínea es decir una línea o formación gaseosa recta. Alguno se preguntará: ¿porqué algunos Cometas presentan una cola curva y no recta como ocurre en la cola de gas?, pues porque esa cola es la denominada cola de polvo que está formada por polvo y pequeños fragmentos rocosos que se desprenden del Cometa cuando el hielo entremezclado con dichos fragmentos se sublima o evapora. Dicha cola de polvo no es rectilínea, no forma una linea recta sino que forma una pequeña curva debido a la inercia que el Cometa tiene en su movimiento orbital. Dicha curva será más o menos pronunciada en función de la velocidad que adquiera el Cometa en su órbita. La cola de polvo además de la cola de gas brilla, pero no con luz propia como en el caso de la cola de gas sino como consecuencia de que cada uno de sus fragmentos de polvo y roca reflejan la luz del Sol al recibirla proveniente del Astro Rey.
Esquema de la órbita de un cometa en su Perihelio apreciándose la cola de gas ionizado (azul) y la cola de polvo (amarillo)
Llegados hasta este punto nos podremos preguntar cuál es la composición de un Cometa o de cualquier Cometa. Un Cometa está compuesto en su parte de hielo por: Agua como es lógico en forma de hielo, hielo «seco» o lo que es lo mismo Dióxido de Carbono en estado sólido o congelado, Metano (CH4), Amoníaco (NH3), Magnesio, Sodio y Silicatos. Los Silicatos son compuestos sólidos o minerales en forma de sales del ácido cilícico de las que están compuestas las rocas de la Tierra, componiendo los silicatos exactamente el 95% de la composición de toda la Corteza Terrestre. Su unidad química básica es la unidad tetraédrica formada por un átomo de Silicio unido a cuatro átomos de Oxígeno con las que están coordinados tetraédricamente. Dentro de cualquier cometa éstas unidades o aniones SiO4 con cuatro valencias negativas están combinados con cationes de hierro en algunos casos, otros con iones de magnesio y otros con los de sodio formando los elementos rocosos de los Cometas como hemos comentado antes.
Terminado su composición podríamos resaltar que el origen de los Cometas está en el caso de los Cometas de periodo largo y con órbitas elípticas, en la Nube de Oort que es una gigantesca burbuja cometaria que rodea el Sistema Solar y en la que su superficie se encuentra a la fantástica distancia de un año luz del Sol y que es uno de los restos o residuos de la formación del Sistema Solar. En el caso de los Cometas de periodo corto o medio su origen se encuentra en el Cinturón de Kuiper.
Después de haber explicado un poco la morfología y composición de los Cometas podríamos decir que el Cometa 46/P Wirtanen es un Cometa de período muy corto, unos cinco años y medio tarda en dar una órbita alrededor del sol y su órbita en su parte más alejada del Sol llega hasta la órbita de Júpiter y por otra parte el núcleo del Cometa es de tan sólo un kilómetro y doscientos metros, una nimiedad lo que lo cataloga como un cometa enano.
Cabe decir que el Jueves día 13 que es cuando los de la Agrupación Magallanes hicimos la observación de este Cometa éste mismo tenía magnitud 3,5 y estaba a una distancia de la Tierra de unos 7 millones de kilómetros o lo que es lo mismo, unas 30 veces la distancia Tierra-Luna, lo que lo hacía visible a simple vista como una pequeña formación grisácea en forma de disquito justo a la izquierda de las estrellas Xi Tauri y Omicron Tauri en la Constelación de Tauro y muy cerca justo a la derecha del Cúmulo de las Pléyades.
Tanto Luis María como Lito hicieron fotografías con sus respectivas cámaras nikon encima de sus respectivos trípodes. En el caso de Luis María con la montura de seguimiento Star Adventurer encima de la cual puso su cámara de fotos para hacer fotos del Cometa.
Foto adjunta del Cometa 46/P Wirtanen realizada por Luis María con su cámara Nikon y la montura Star Adventurer. Arriba a la izquierda el Cúmulo Abierto de Las Pléyades.
Por mi parte no hice fotos pero si que puse a disposición de todos mis compañeros de Magallanes mi Telescopio «Goliat», un telescopio reflector Dobson de 16 pulgadas (40 centímetros de apertura). Para la observación del Cometa utilicé un Ocular QX Wide Angle de la Marca Meade de 26 mm de Focal que proporcionaba al Telescopio «Goliat» unos 73 aumentos. La vista del Cometa a través del Telescopio era espectacular, se veía un pequeño núcleo o disquito central brillantísimo, muy blanco, rodeado de una neblinosidad tenue de un color gris claro. El propio Joaquín se quedó gratamente satisfecho ante tal vista a través del telescopio al igual que Agustín y su hija Marta y el resto de integrantes de la Agrupación Magallanes En cuanto a mi, tuve a bien colocar el Cometa en muchas ocasiones abajo a la izquierda en el campo de visión del ocular para de esta manera compararlo con un pequeño cuadrilatero de estrellas de parecida luminosidad entre ella, que se encontraban en la parte superior derecha y de esta manera comparar la visibilidad entre el Cometa y objetos de apariencia estelar como esas cuatro estrellitas del ángulo superior derecho del campo de visión del ocular.
A eso de las 11 y media de la noche ya se habían marchado todos los integrantes de la Agrupación Magallanes excepto yo quedarme un poquitín de tiempo más aprovechando que la luna se había ocultado del todo y de esta manera observar algunos objetos de Cielo Profundo si bien el cielo en la zona en la que me encontraba era de mediana calidad con buena parte del cielo oeste muy iluminado por las luces de Jerez.
Estuve exactamente hasta las 1:45 de la noche después de la cual tuve que marcharme a mi casa debido al intenso frío reinane y también debido a que no tenía a mano suficiente ropa de abrigo con el que contrarrestarla.
Observé hasta entonces unos 17 Objetos de Cielo Profundo, las cuales voy a enumerar a continuación:
3 Galaxias:
- Galaxia Espiral NGC 7331, localizada en la Constelación de Andrómeda.
- Galaxia Espiral IC 342, localizada en la Constelación de Camelopardalis.
- Galaxia Espiral Barrada NGC 4236, localizada en la Constelación del Dragón.
5 Nebulosas Planetarias:
- Nebulosa Planetaria NGC 40, conocida como la Nebulosa de la Pajarita, localizada en la Constelación de Cefeo.
- Nebulosa Planetaria NGC 1535, conocida como la Nebulosa Ojo de Cleopatra, localizada en la Constelación de Eridano.
- Nebulosa Planetaria NGC 2392, conocida como la Nebulosa del Esquimal, localizada en la Constelación de Géminis.
- Nebulosa Abell 21, conocida como la Nebulosa de la Medusa, localizada en la Constelación de Géminis.
- Nebulosa Planetaria NGC 2371, localizada en la Constelación de Géminis.
3 Nebulosas normales de Emisión:
- Messier 42, en la Constelación de Orión.
- Messier 43, en la Constelación de Orión.
- Nebulosa NGC 2359, conocida como la Nebulosa «el Casco de Thor», localizado en la Constelación del Can Mayor.
4 Cúmulos Estelares Abiertos:
- Messier 52, localizado en la Constelación de Cassiopea.
- Cúmulo Abierto NGC 7789, también conocida como «la Rosa de Caroline», localizado en la Constelación de Cassiopea.
- Cúmulo Abierto NGC 2395, localizado en la Constelación de Géminis.
- Cúmulo Abierto NGC 2374, localizado en la Constelación del Can Mayor.
1 Remanente de Supernova:
- Messier 1, Nebulosa del Cangrejo, en la Constelación de Tauro.
1 Cometa:
- 46/P Wirtanen, localizado en la Constelación de Tauro.
Imagen del Telescopio Reflector Dobson de 16 pulgadas (40 centímetros de apertura) apodado «Goliat».
A continuación voy a relatar cuál es el aspecto visual al Telescopio «Goliat» de los 17 Objetos de Cielo Profundo que tuve ocasión de presenciar:
En cuanto a las 3 Galaxias, la Galaxia Espiral NGC 7331 en Andrómeda aparece al Telescopio «Goliat» como un pequeño disco de un color gris claro visto casi de canto, con un minúsculo abultamiento central muy llamativo. Para localizar esta Galaxia solo tuve que irme con ayuda del buscador de 7X50 adosado a la parte superior del Telescopio a una zona próxima resultante de doblar hacia adelante las dos terceras partes de la separación entre las estrellas Mu Pegasi y Matar (Eta Pegasi) y con ayuda del programa Sky Safari (mapa estelar) que tenía en mi Ipad utilizando unas estrellas de referencia en esa zona, localizarlo por fin la galaxia en cuestión. Utilicé para su observación un ocular Ethos de 21 mm de Focal.
En cuanto a la Galaxia Espiral IC 342, visto a través del telescopio aparece en principio un núcleo pequeño de un color gris claro rodeado por una nube muy difusa de aspecto circular. Dicha galaxia la localicé dirigiendo el Telescopio «Goliat» hacia el sur de la estrella Beta Camelopardalis y utilizando consigo como referencia en el Buscador la estrella HR 1124 y una estrella contigua hacia su derecha.
En referencia a la Galaxia Espiral Barrada NGC 4236, visto a través del Telescopio aparece como una formación difusa aplanada de un color gris oscuro y para su localización solo tuve que dirigirme hacia la estrella Gianfar (Lambda Draconis) e inmediatamente hacia la izquierda a las inmediaciones de la estrella Kappa Draconis para localizarla de forma y manera inmediata.
Sobre las 5 Nebulosas Planetarias, en concreto la primera, la Nebulosa de la Pajarita, visto al Telescopio «Goliat» aparece como un ensanche nebuloso de un color gris claro en torno a una estrella bastante brillante. Para su localización solo tuve que dirigirme hacia la izquierda de la estrella Errai (Gamma Cephei) y junto a unas estrellas de referencia de escasa luminosidad observadas a través del Buscador de 7X50 logré ver la nebulosa.
En cuanto a la Nebulosa Ojo de Cleopatra (NGC 1535) a través del Telescopio «Goliat» se ve como un gran ovillo de color verdeazulado que destacaba entre estrellas de brillo mediano. Para su localización me dirigí hacia la estrella Zaurak (Gamma Eridani) al comienzo de la enorme curva del asterismo de la Constelación de Eridano y después con el Buscador de 7X50 me dirigí en dirección a la Constelación de Orión concretamente a las estrellas HR 1265 y 39 Eridani, muy destacadas vistas a través del Buscador. Finalmente lo único que tuve que hacer era buscar el vértice que junto con estas dos estrellas forman un triángulo recto y de seguida me topo con la nebulosa.
Pasando a la Nebulosa del Esquimal (NGC 2392) hay que decir que visto a través del Telescopio «Goliat» se aprecia una nebulosidad circular de aspecto amarillento rodeando una estrella de brillo mediano. Para la localización de la Nebulosa del Esquimal sólo tuve que ir a las proximidades de la estrella Wasat (Delta Geminorum) y con el Buscador de 7X50 localizar las estrellas 56, 61 y 63 Geminorum y a partir de ésta última que a su vez está integrado en un semicirculo de estrellas, dirigirse hacia el exterior de ese semicirculo e inmediatamente se puede visualizar la nebulosa.
En cuanto a la Nebulosa Abell 21 o Nebulosa de la Medusa tuve que utilizar un filtro O III para localizar los filamentos semicirculares de color gris oscuro de la nebulosa y para su localización tuve que partir de la estrella Alkibash (Lambda Geminorum) y a partir de ahí guiarme a través de un acúmulo de estrellas localizado por el Buscador de 7X50 hasta llegar a la nebulosa.
Por último la Nebulosa Planetaria NGC 2371 aparece a través del Telescopio «Goliat» como una formación de color celeste en forma de dos lóbulos o chorros polares que emergen de una zona central más estrecha. Para la localización de esta nebulosa tuve que dirigirme a las estrellas Castor y Polux y más concretamente a una estrella de menor brillo como es Iota Geminorum y a partir de ahí a las estrellas b Geminorum y 69 Geminorum cuyo alargamiento hacia adelante varias veces me hicieron dirigirme y toparme de lleno con la nebulosa.
En cuanto a las tres nebulosas normales de emisión, mención aparte y muy destacada es la Nebulosa «el Casco de Thor» (NGC 2359), un auténtico espectáculo. Cabe decir por el contrario que ésta nebulosa no es visible sólo a través del ocular, sino que empleé además un filtro O III enroscado en él y es en ese momento cuando verdaderamente se ve la nebulosa en su auténtica majestuosidad. Se ve como una formación de un color gris muy muy intenso del cual emergen por arriba y por abajo lo que se asemeja a dos brazos semicirculares de una tonalidad un poco más difusa. Es uno de los objetos más sobresalientes que tuve la ocasión de ver esa noche.
Con referencia a la Nebulosa Messier 42 o Nebulosa de Orión, a través del Telescopio «Goliat» se ve una gigantesca formación nebulosa en forma de medialuna de un blanco intensísimo. De la parte o bulbo central blanquísimo de la nebulosa emergen hacia la derecha e izquierda y hacia arriba enormes torbellinos gaseosos blanquecinos en cuyo interior se aprecian filamentos blancos alternando con zonas menos blancas pero igualmente llamativas. Por supuesto, en el centro de la parte o bulbosidad central se encuentran cuatro estrellitas en cuadrilátero conocidas como «el trapecio».
En las proximidades de Messier 42 encontramos a la Nebulosa de Mairan conocida como Messier 43, apreciándose una formación circular blanquecina rodeando a la estrella Nair al Saif.
Hablando de los Cúmulos Estelares Abiertos NGC 2395 y NGC 2374 nada llamativo que reseñar salvo destacar tal vez que visto a través del ocular Ethos de 21 mm en el Telescopio «Goliat» se pueden apreciar dos formaciones estelares más o menos circulares de estrellas muy parejas en cuanto a luminosidad pero a su vez poco luminosas.
En cuanto a Messier 52, visto a través del Telescopio «Goliat» aparece como una formación de estrellas bien delimitada y con estrellas relativamente poco destacadas.
Mención aparte es el Cúmulo NGC 7789 que a mi modo de ver es un auténtico espectáculo de primera magnitud. Cuando Luis María tuvo oportunidad de ver éste cúmulo se quedó impresionado al igual que yo. Para verlo en su majestuosidad de manera conjunta empleé un ocular que proporcionara al Telescopio «Goliat» bajos aumentos, concretamente el ocular QX Wide Angle de 26 mm de Focal y visto al Telescopio se apreciaba un rosario de estrellas muy numerosas y densísima que se asemejaba a polvo de diamante sin lugar a dudas. Con toda la razón del mundo a este cúmulo de estrellas densisimo se le conoce como la «Rosa de Caroline» en honor a Caroline Herschel. Para su localización me fue fácil, sólo tuve que dirigirme a las inmediaciones de la estrella Caph (Beta Cassiopeiae) que es la estrella punta del palote derecho del asterismo de la W de la Constelación de Cassiopea y justo un poco retirado a la derecha me encuentro este cúmulo estelar.
Y ya para finalizar el Remanente de Supernova conocida como la Nebulosa del Cangrejo, Messier 1, en la Constelación de Tauro que al Telescopio «Goliat» se ve como una pequeña formación grisácea clara un poco estirada y en cuyos bordes puede apreciarse pequeñas zonas claras de aspecto semicircular que rodean zonas oscuras. Para localizarlo me fue fácil, sólo tuve que dirigirme a las inmediaciones de la estrella Zeta Tauri y un poquitín arriba y apartado, encontrarme la nebulosa.
Y nada más, a eso de las 1:45 de la madrugada procedí a recoger el Telescopio y regresar a mi domicilio.